Entre otras cosas, comunmente las marcas comercializan que sus botas de control son exclusivamente para el mediocampo, en el momento en que incluso un portero va a estar bien si emplea unos cuantos estos. La selección francesa entra en la competición con una de las equipaciones más llamativas. El amarillo gana protagonismo en detrimento de las líneas negras, que se difuminan y pierden intensidad.